Según cifras oficiales, difundidas por el Departamento de Trabajo, en Estados Unidos hay disponibles 8,1 millones de empleos, que no son ocupados porque los ciudadanos pierden cobro de subsidios, a decir de parlamentarios del Partido Republicano.
Las ofertas de trabajo en los Estados Unidos aumentaron casi un 8% en marzo, a un total de 8,1 millones de plazas, la mayor cantidad desde diciembre de 2000, difundió hoy el Departamento de Trabajo.
La enorme cantidad de vacantes disponibles se produjo luego del pago de U$S 300 adicionales por semana en ayuda federal por desempleo, además de otra ayuda estatal que promedia los U$S 320, para paliar los efectos de la pandemia, que muchos estadounidenses temen perder si es que se incorporan al mercado laboral formal.
Frente a esta situación, legisladores republicanos advirtieron que esos fondos no ayudan a que los desempleados salgan a buscar nuevos trabajos.
En este marco, varios Estados amenazaron con cortar el pago de la ayuda de U$S 300, entre los que se encuentra Georgia.
En respuesta a la crítica republicana, el presidente, Joe Biden, rechazó que el pago suplementario de U$S 300 dólares sea el culpable de esta situación.
No obstante, el mandatario instó a sus funcionarios a trabajar con los Estados para renovar los requisitos de las personas que reciben ayuda, de manera de que salgan a buscar trabajo y tomar un puesto si se les ofrece.
"Cualquiera que cobre desempleo, a quien se le ofrezca un trabajo adecuado debe aceptar el trabajo o perderá sus beneficios de desempleo", dijo Biden.
Los empleadores estadounidenses publicaron un número máximo de empleos disponibles en marzo, lo que muestra que las empresas tienen dificultades para encontrar nuevos trabajadores a medida de que el país sale de la pandemia y la economía se expande.
Sin embargo, las ganancias totales de empleo aumentaron solo modestamente, según el informe del Departamento de Trabajo en Washington.
Las cifras van en línea con el informe de empleo de abril de la semana pasada que fue mucho más débil de lo esperado, en gran parte porque las empresas parecen incapaces de encontrar a los trabajadores que necesitan, incluso con la tasa de desempleo en un 6,1%.
La contratación general de ese mes aumentó menos de un 4%, a 6 millones. El número de contrataciones es una cifra bruta, mientras que el informe de empleo del Gobierno, que dice que se agregaron 770.000 puestos de trabajo en marzo, utiliza un total neto.
Las ofertas de empleo aumentaron en la mayoría de las industrias, incluidos restaurantes, bares y hoteles; fabricación; construcción; y venta al por menor y cayeron en el cuidado de la salud y el transporte y el almacenamiento.
Sin embargo, muchas personas sin trabajo también son reacias a aceptar empleos en industrias de servicios que requieren contacto con el público, por temor a contraer covid-19.
Al mismo tiempo, muchas mujeres no están buscando trabajo porque no han encontrado cuidado infantil para niños que todavía están en casa tomando clases en línea durante al menos parte de la semana.